Ad Libitum y practica

Práctica Del Violín

Los violinistas virtuosos no aparecen en los escenarios de la nada (práctica del violín). Por cada 45 minutos de concierto ó 90 minutos de recital, existe un gran número de horas de trabajo duro pero sobre todo inteligente; en cada nota, en cada frase y mismo en la forma que la música ha sido trabajada, escrita y memorizada.

Puede parecer extraño pensar que la práctica de violín adecuada es el elemento central para dominar el instrumento, pero ¿ sabe usted como estructurar su sesión de práctica ? ¿ está seguro que trabaja en las cosas correctas ? y no sólo en las cosas correctas, ¿ se encuentra en el camino correcto del aprendizaje ? Evidentemente no existe un método universal que funcione para todo el mundo, pero tomando lo que más le convenga de los siguientes consejos podrá ayudar.

Elementos principales para el correcto aprendizaje del violín

Para desarrollar sesiones de práctica de violín efectivas, es necesario reunir tres elementos determinantes en su aprendizaje:

Paciencia
Trabajo Inteligente
Tiempo de práctica

Uno de los errores más comunes en los violinistas principiantes, intermedios e incluso avanzados, es pensar que largos, muy largos períodos de trabajo desarrollaran nuestras habilidades, sin detenernos a pensar que nuestras capacidades intelectuales y físicas disminuyen después de cierto tiempo. Por lo tanto, es muy importante, reconocer en dónde esta nuestro límite de concentración. En ocasiones, es preferible trabajar tres o cuatro veces al día en lapsos más cortos pero con un nivel de concentración más elevado.

Paciencia

Usted no se convertirá en un virtuoso del violín como Paganini en un abrir y cerrar de ojos. Así que sea paciente con usted mismo, no se desanime. Establezca objetivos y metas alcanzables para cada sesión de trabajo y mantenga en todo momento una actitud positiva.

Trabajo Inteligente

A menudo nos enteramos que otros estudiantes de violín pretenden practicar horas y horas, lo cual, en ocasiones, nos hace reflexionar en si estamos dedicando el tiempo suficiente a nuestra práctica de violín cotidiana. Es importante tener en mente que el trabajo inteligente no consiste en trabajar mucho, el trabajo inteligente consiste en trabajar mejor. Por ejemplo, cuando un cambio de posición resulta complicado y difícil, y usted determinó que su sesión de práctica es de 15 minutos, dedique la totalidad de su sesión a corregir o practicar dicho cambio de posición. Notará que en un par de sesiones dicho cambio comenzará a facilitarse o el problema quedará corregido. El nivel de concentración en una práctica de 15 minutos es muy elevado. Por el contrario, si usted lleva una o dos horas de práctica y decide dedicar los mismos 15 minutos para practicar dicho cambio de posición, necesitará más de dos sesiones para lograr mejorarlo.

No Ignorar las Escalas

Por más que quiera evitar y que deteste la práctica de las escalas ( y créame, todos hemos pasado por ahí), son el corazón de todas las melodías que toca y que tocará. Al practicarlas, usted aprende los cambios de posición y los intervalos que le permitirán avanzar hacia melodías más complejas. Para optimizar sus sesiones de práctica de violín, inicie y termine con algunas escalas. Lleve un control escrito en papel o en alguna hoja de cálculo que le permita tener un control y un ritmo razonable. No practique solo las escales fáciles.

Lea por lo menos cada dos días

La lectura musical proporciona grande ventajas en nuestra práctica del violín. Además de incrementar nuestro repertorio y darnos la posibilidad de interpretar melodías de nuestro agrado, la lectura genera habilidades esenciales, acelera el aprendizaje y nos enseña los cambios de posición, así como, un uso eficiente del arco. A su vez, la lectura le da la posibilidad de participar o ser miembro de algún dúo, cuarteto u orquesta sinfónica.

Aprenda a practicar sin violín

Puede haber momentos en los que tenga la necesidad de sumergirse en su práctica de violín pero simplemente no es funcional. Por suerte, existen muchos ejercicios que pueden ayudarle a mejorar su técnica y a interiorizar la música: escuchar y analizar melodías, ver vídeos, analizar partituras, hacer sombras (tocar el violín sin instrumento ni arco), estiramientos, ejercicios de flexibilidad y destreza.

Encuentre el lugar adecuado

Reflexione en su estilo de aprendizaje y en el medio ambiente en el que suele trabajar mejor. Para obtener una práctica más eficiente, asegure eliminar cualquier tipo de distracción, que el área en donde trabaja está limpia, organizada y recogida.

Pida a su profesor que lo guíe

Es posible que sienta que puede trabajar perfectamente solo, pero si usted no tiene un segundo par de oídos que le indique el camino correcto, puede resultar difícil identificarlo. Un buen profesor de violín no sólo será capaz de supervisar su postura, sino que será capaz de darle consejos sobre una mejor sujeción del arco, afinación y sus habilidades generales de maestría musical.

¡Ven a conocernos!

Estaremos encantados de conocerte, que visites nuestras instalaciones y explicarte con detalle nuestra metodología docente. Además podrás hablar sin compromiso con nuestros profesores sobre tus intereses e inquietudes.

  Brenda Luisa Bea Zamorano
Es editora, traductora y correctora de Ad Libitum. Su trayectoria en el mundo de la música comenzó como violinista desde los 8 años. Desde ahí prometió no dejar la música y lo ha cumplido.

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